Te has preguntado alguna vez cuánto de ti es real cuando usas un filtro en redes sociales?” Esas herramientas digitales que modifican nuestros rasgos faciales y corporales se han vuelto parte de nuestra rutina diaria, casi sin darnos cuenta. A simple vista, son divertidos, prácticos, y hasta nos ayudan a explorar versiones más femeninas o refinadas de nosotras mismas.
Imaginemos esta situación: Gabriel: '' Y sabes me encontré con esta chica que te juro que se veía hermosísima en su perfil, ósea ni yo mismo me creía estar hablando con tal belleza y cuando la vi, era una completamente diferente, no se veía para nada como en la foto“
Aurora: ''Y llegue a la cita y el tipo salió espantado pero no entiendo porqué, si se me nota que soy una muer trans, ósea casi no he utilizado filtros', además soy una chica después de todo, no tengo que andar diciendo lo que soy''
Ya ok si, pero inclusive una mujer cis que usara muchos filtros, sus citas saldrían espantadas si no es ni cerca a la imagen de su perfil.
¿qué pasa cuando esa imagen filtrada empieza a influir en cómo nos vemos fuera de la pantalla?
Para muchas de nosotras, especialmente en la comunidad transgénero y crossdresser, los filtros nos permiten experimentar con nuestra identidad y proyectar una imagen que a veces sentimos que el mundo no está listo para ver. Nos vemos hermosas, perfectas, como la mejor versión de nosotras mismas. Pero también nos enfrentamos a la duda:
¿Por qué no me siento igual sin ese filtro?
Los filtros no solo retocan la piel o afinan los rasgos; también pueden modificar cómo nos percibimos en la vida real. Nos invitan a hacernos la pregunta: ¿Estoy usando esto para expresarme o para encajar en una expectativa que no es mía?
"Más allá de la diversión, los filtros digitales juegan un rol en cómo moldeamos nuestra autoestima y nos conectamos con nuestra identidad real y virtual."
“Los filtros nos muestran una imagen, pero nos toca a nosotras decidir cuánto de esa imagen nos pertenece realmente.”
Reflexionemos juntas sobre el impacto que tienen en nuestra identidad y cómo usarlos de manera saludable. No se trata de demonizar la tecnología, sino de comprender cómo nos afecta y tomar el control de nuestra imagen, sin perder de vista quiénes somos en el proceso.
Y digo, no voy a decir que no he utilizado la tecnología para usar los filtros muchos son muy buenos pero yo misma descubrí algo que me hizo dar cuenta que algo se estaba desbalanceando.
Se debe usar la tecnología con inteligencia y entender que es lo que realmente estas buscando.
Si tu idea es tener una idea de como podrías verte en hormonas porque ese será tu camino, lo encuentro bastante válido, si lo usas en tu MAPA DE VISION sobre tus metas. Si quieres tener varias imágenes de como te verías como madre, en un matrimonio con una pareja, o rodeada de tu familia, lo encuentro genial y de hecho yo ofrezco ese servicio, porque yo misma lo uso con esa intención y me parece genial te ayuda a recordar tus objetivos constantemente y te ayuda a proyectarte.
PERO...
Si vas a compartir con el mundo esa supuesta imagen, pues hay que tener cuidado, lo que otros puedan decir de tu imagen puede influir negativamente sobre ti. Claro primero vendrá la alegría, el entusiasmo, la admiración, pero lentamente va a ir mellando en como realmente te ves y quizá en algún momento te suceda lo que le sucedió a Aurora si vas muy lejos, aunque también podrías simplemente crearte una imagen tan distorsionada en la que de alguna forma tu psiquis y tu deseo de verte como mujer se siente identificada pero todos los que te rodean no ven esa misma imagen y te lo dice alguien que se encarga de hacer hipnosis y reprogramaciones conductuales jajaja, ósea manejo el tema y entiendo bien la mente y el poder del deseo.
Estas herramientas se deben usar con responsabilidad, control y precaución, ES FACIL CONFUNDIRSE.
“¿Alguna vez te has preguntado qué sucede cuando esa imagen perfecta que ves en la pantalla no coincide con la que ves en el espejo?”
Los filtros digitales tienen un efecto directo sobre nuestra autoestima y autoimagen. A veces, sin darnos cuenta, comenzamos a sentir que solo somos ‘nosotras mismas’ cuando estamos usando ese filtro que afina nuestra nariz, ilumina nuestra piel o resalta nuestros ojos. Pero ¿qué ocurre cuando nos acostumbramos tanto a esa versión idealizada que nos sentimos incómodas sin ella?
"La verdadera belleza no está en la perfección que nos muestran los filtros, sino en la autenticidad que proyectamos al mundo."
Los estudios han demostrado que la sobreexposición a imágenes perfectas en redes sociales puede crear distorsiones en nuestra autoimagen, especialmente para personas en proceso de transición o que exploran su identidad de género. Estas imágenes no solo moldean lo que creemos que es aceptable, sino también lo que creemos que debemos ser.¿Cómo podemos entonces romper ese ciclo? Aprendiendo a valorarnos por quiénes somos, tanto dentro como fuera de la pantalla.
"Es esencial recordar que los filtros son solo una herramienta, no la verdad sobre quién eres realmente."
¿Una Nueva Forma de Expresión o una Distorsión de la Realidad?
Los filtros han cambiado la forma en que nos vemos y cómo queremos ser vistos. Pero, ¿es esta transformación una forma de liberación o un simple engaño?
Vivimos en una era donde la imagen y la percepción juegan un papel crucial en nuestras interacciones. Para muchas personas, especialmente para quienes pertenecen a la comunidad transgénero y de crossdressers, los filtros y efectos digitales pueden ser una forma de autoexpresión. No obstante, también pueden presentar un peligroso doble filo. ¿Estamos utilizando estas herramientas para celebrar nuestra identidad, o nos estamos perdiendo en una versión distorsionada de nosotras mismas?
Reapropiándonos de Nuestra Identidad en el Mundo Virtual
“Reclamemos el control sobre nuestras imágenes y nuestra identidad. No se trata de ocultarnos tras filtros, sino de resaltar quiénes somos realmente.”
En un mundo donde los filtros digitales pueden distorsionar nuestra percepción de la realidad, es crucial recordar que nuestra identidad no depende de una imagen editada, sino de cómo nos sentimos y nos expresamos. Cada vez que abrimos nuestras redes sociales, tenemos la oportunidad de elegir: ¿nos presentamos tal como somos o como la versión idealizada que otros esperan ver?
“La verdadera fuerza radica en la vulnerabilidad. No temamos mostrar nuestras cicatrices, pues son parte de nuestra historia.”
Ejercicio Final:
Mi Manifiesto Personal
Te invito a escribir en la caja de comentarios un breve manifiesto sobre lo que significa para ti la autoaceptación. Incluye frases que refuercen tu identidad y resalten las cualidades que más valoras de ti misma. Este manifiesto se convertirá en un recordatorio constante de que tu valor no se mide en likes o filtros, sino en la valentía de ser tú misma.
Reapropiarnos de nuestra identidad en el mundo virtual implica tomar decisiones conscientes sobre cómo nos mostramos al mundo. Recuerda siempre: la belleza real radica en la autenticidad, esa autenticidad es la que se proyecta realmente y tiene la capacidad de impactar de forma positiva a tu alrededor.
Namaste.
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